Cuándo soñé en un lugar que visitar contigo fue París, como cuna del amor, pero no fue así.
Justo después de ir a esa ciudad idílica te perdí.
Ahora cada vez que veo la Torre Eiffel solo recuerdo las noches frías que me acompañaron después.
No puedo decir ya cuánto te amo.
He recorrido, las calles de Londres, he cruzado tantos controles de aeropuertos con mi maleta y mi pasaporte.
Siempre en la búsqueda de algo.
De alguien.
Me encontré a mi en las Calzadas del Gigante, me perdí en Madrid.
Quiero que alguien me encuentre, en Glasgow o porqué no en Moscú
Y si ese nalguie eres tú te aseguró que estaré allí. En medio de la Plaza Roja, con mi abrigo negro y mis botas a juego, sabes que adoro el frío.
No quiero perder el tiempo.
No quiero perderte.
No quiero perderme.
No quiero que nos perdamos ni en Moscú, ni en Madrid, no hay lugar que quiera visitar que no sean tus brazos ni tus labios.